lunes, 7 de febrero de 2011

Ausente

Llevo tiempo sin aparecer y he extrañado este espacio. Tanto que he tenido ganas de escapar de los ruidos
pegadisos de lugares turìsticos como èste, para escribir unas líneas.
No hay tiempo para la reflexión o el autoconocimiento, no hay tiempo para la evaluación del año pasado. Todas esas tareas quedan pendientes para los días próximos.
Pero querìa pasar igual  y escribir un poco, porque me gusta comenzar el año en lugares cómodos, expansivos y genuinos. Y en éstos últimos meses este blog ha sido, sin duda, uno de ellos.
Me concentro fielmente por horas en mi trabajo y aún tener horas para deambular alegre persiguiendo los costados màs interesantes de las cosas.
Pienso que tendría que escribir a A. para saber cómo está, si espera descalza que su cartero llegue a casa.
Pienso que debo retomar mis charlas nocturnas con P. mi sensible hallazgo mendocino!
Pienso pasar una tarde de río con G. y M.
Piendo enviarle un trabajo a D. y que se impregne en mis colores.
Pienso abrazar a L, cuando llegue Luz.
Pienso en el beso fresco, de río.. de L.
Pienso en las costumbres que apenas entreví  de personas distintas en lejanos países.
Trabajo en casa, me muevo en el ámbito próximo de la gente que conozco y quiero. Pero estoy teniendo, aparentemente, síndrome de nostalgia inversa.
Creo que extraño el mundo.